La Policía Municipal de Valladolid ha interceptado a un ciclista al que pilló mientras circulaba por una zona peatonal con evidentes signos de encontrarse bajo los efectos del alcohol, como luego corroboró el control realizado en el que arrojó una tasa de 1,03.

Los hechos se produjeron sobre las 20.15 horas de este jueves, cuando una patrulla observó a un varón que transitaba por una zona peatonal de la Plaza de la Cruz Verde a bordo de una de las nuevas bicicletas del servicio de alquiler municipal (BIKI).

Lo que llamó además la atención de los agentes es que el ciclista agarraba el manillar de la bici con una mano mientras en la otra llevaba una litrona de la que bebía en marcha.

Una vez interceptado, los policías comprobaron que el individuo presentaba evidentes signos de encontrarse bajo los efectos del alcohol, con lo que llamaron a los compañeros de atestados.

Sometido a los correspondientes controles, el varón arrojó en un primer momento una tasa de 1,03 gramos de alcohol por litro de aire espirado y, en una segunda toma, 0,87, por lo que el infractor fue denunciado por este motivo y también por circular por una zona peatonal.

Además, la Policía Municipal se puso en contacto con un responsable del servicio municipal de alquiler de bicicletas para que se hiciera cargo del velocípedo.