Pimpante actuación de un chulo en el Senado, que se pasó por el arco la verdad, el respeto, la ética, la estética y toda la gama de buen comportamiento y principios morales, riéndose del Senado como lo hace de todos los españoles. No sabía, no recordaba, no le constaba, que espectáculo más bochornoso, y eso que hay que reconocer que ha mejorado algo, no citó a Franco durante toda la larga sesión, se limitó a la retahíla acostumbrada de lo malos que son los otros, o sea el PP y lo buenos que son ellos: la pareja de Ayuso, la foto con el narco, la financiación de Génova, la Gurtel, Bárcenas, Granados, etc, etc. Pero dijo UNA VERDAD, sí, todavía le deben estar escociendo las cuerdas bucales, la garganta y la boca, y rebotando como posesas contra el cráneo las neuronas responsables de tan extrañísimo comportamiento en su persona ¿Cuantos iban en el Peugeot? preguntó la senadora de UPN, señoría ¿de verdad me hace Vd. esa pregunta? responde el interpelado con muestras de extrañeza y aspavientos, pero señoría, pues dependiendo del día, fue su repuesta en tono burlón. Toma ya, lo que yo sospechaba, en el Peugeot, unos días iban los cuatro cuatreros, uno ya en la cárcel otros dos a punto de ir y el interpelado también, si hay justicia, y otros seis o más. Los cuatro, más, como mínimo otras dos, en el regazo de Ábalos y Koldo en el asiento trasero, bastante apretados, eso sí, no podrían practicar el helicóptero por falta de espacio, y los pasajeros delanteros, o sea, Pedro y Cerdán, comiéndose el salpicadero, porque los dos individuos son de volumen, pero mejor, más apretaditos para el uso y disfrute del material procedente de los negocios de Sabiniano, que además de la pasta gansa para los gastos, proporcionaría lumis para contribuir al solaz del guerrero y hacer más llevaderos los kilómetros recorridos, mejor llevarlas consigo que parar en ruta en los locales con iluminación de gas noble, que luego todo se sabe.

Todavía queda gente que piensa que en España tenemos democracia, cuando lo que tenemos es una pantomima, una rémora, un club de la comedia, un circo poblado de payasos. Era lo que faltaba, un forajido perdonándole la vida al presidente del gobierno, una rata que huyó escondida en una cajuela escoltado por la policía, que vive a cuerpo de rey en Waterloo a costa de los españoles, y todo porque lo consienten unos gobiernos que, cuando no están presididos por traidores, lo están por payasos que desperdician mayorías que hubieran permitido poner orden en este patio lleno de locos, faltos de sentido común, aprovechados y tontos de remate. A mí no hay quien me quite que quien mandó meter a Puigdemont en el maletero de un coche y escoltarle fuera de nuestras fronteras fue Rajoy, pensando que así se libraba de un grano en grano en el culo ¿Llegaremos a tener un gobierno que se plantee poner remedio a tanto cachondeo? Puede que no nos lo merezcamos. Para que te toque la lotería es necesario comprar un décimo. Existe un dicho popular que sentencia que "en décimos regalados nunca toca el gordo".

Otra placa, ahora en La Real Casa de Correos. Solo falta, alguien ya lo ha pensado, y lo ha dicho, ¿por qué no poner una placa en cada uno de los edificios de Madrid que fueron checas? Sí, ya solo falta el pirado que esté dispuesto a hacerlo y pueda, así dejaremos guapo Madrid, y podremos solicitar para la urbe el título de CIUDAD MUNDIAL DE LA CONCORDIA, como los franceses, que pusieron ese nombre a la plaza donde cortaron miles de cabezas, muchísimas más de plebeyos que de aristócratas, en contra de lo que mucha gente cree. Asco da todo aquel que resucita el odio entre españoles, sobre todo los desmemoriados de la memoria histórica, que solo recuerdan lo que les interesa. Puede que Dios no sea tan bueno como nos cuentan cuando permite nacer a gente como Zapatero y sus adeptos de la desmemoria histórica. En fin, vamos a creernos eso de los renglones torcidos de Dios para que nos ayude a comprender, que quien no se consuela es porque no quiere.

El ceremonial organizado por el gobierno por el aniversario de la DANA penoso. Un fingimiento con el único objetivo de blanquear la lamentable actuación del gobierno durante la catástrofe, hay que ser miserable para utilizar una terrible desgracia, que ha afectado a tanta gente, con fines políticos, el acto vigilado por un ejército de policías, no se fueran a repetir las imágenes de Paiporta. Y hablando de ejércitos, que el ejército no acudiera a prestar ayuda, contando con efectivos y material, más que considerables, a pocos kilómetros, debería ser juzgado como homicidio por denegación de auxilio. No se pudo enviar ni un soldado en auxilio de las gentes de Valencia, pero sí un barco a proteger una flotilla de esgarramantas, perroflautas, parásitos y vividores varios. Lo que no entiendo es que hacían Feijoo y Mazón allí, supongo que al Rey no le quedaba otra, hubieran mostrado más respeto a las víctimas no contribuyendo a un acto de blanqueo de culpas y pura propaganda. Podían haber esperado a organizarlo un poco antes de la convocatoria de elecciones, total, qué más da, si ha pasado un año como si pasan tres, más tardan en llegar las ayudas prometidas. Venga, un funeral, que es más vistoso y más barato, mucho te quiero perrito pero pan poquito.

Lamentable haber asistido a las sesiones de la Televisión Espantosa, y otros antros donde habita tanto lameruzo, adulador del gobierno con tal de seguir pastando en la pradera pública, que nos metieron hasta en la sopa imágenes del reencuentro familiar de los rehenes vivos entregados por Hamás. Que forma de resaltar unas muestras de alegría, comprendidas cuando aparece alguien querido a quien ya se daba por muerto, ya se sabe que el ser humano es muy propenso a reír por no llorar. Solo faltó decirnos que se trataba de muestras de agradecimiento a los terroristas por haberlos liberado. No nos atizaron las mismas sesiones cuando lo familiares recibieron cadáveres, ni se han preocupado de aquellos que ni el cadáver de su ser querido han podido recuperar. Por supuesto que se debe informar, pero debe hacerse con un mínimo de equidad y rigor, se debe contar todo, porque si no, la información se convierte en una verdad a medias, es decir, en una mentira.

¿Que pretenden con tales actuaciones? Está muy claro, vender que Israel es el malo, y no digo que sean hermanitas de la caridad, pero hombre, si Hamás tuviera el poder de Israel ya sabemos que todos los judíos estarían en el mar y que a la hora de ceder es Israel quien más cede, pero eso es poco reconocido. Cargar con el estigma de haber matado a Jesucristo, desde tiempos bíblicos, es un lastre que el pueblo judío no se quita de encima ni, aunque se deje matar.

Las FAR matan 460 personas en un hospital de Sudan, una más de las masacres perpetradas por mercenarios y asesinos apoyados económicamente con dinero del petróleo árabe. Una guerra que dura años, donde se cometen atrocidades inimaginables y de la que la pijiprogresía amiga de Hamás no se entera, no hacen manifestaciones, no dicen nada, seguramente porque los asesinados no son de la religión del profeta. La barrila diaria nos la dan con gaza, según quienes sean los muertos interesa o no interesa. Son más falsos que Judas.

Y hablando de pijiprogres ¿Dónde están las manifestaciones feministas de apoyo a la joven violada por la manada argelina el pasado día 23 en Pamplona? ¡Ah! que ahora los violadores no son españoles, ni militares, ni guardias civiles, como los de la otra manada ¿Y las aperturas machaconas de telediarios de las televisiones y radios espantosos? ¿Y los titulares en primeras páginas de los periódicos de esos periodistas que se consideran profesionales y son unos lamebotas del gobierno? ¿Se puede dar más asco? ¿Y donde la responsabilidad de un gobierno, que la tiene y mucha, cuando se cometen delitos por gente que no debería estar aquí? El gobierno y el parlamento están mas a legislar sobre el uso de la palabra cáncer y otras chorradas semejantes, que deben ser las que más preocupan a los españoles. Les pagamos buenos sueldos y no se ganan ni el agua que beben, que digo, muchos, en lugar de cobrar, deberían pagar por el daño que nos hacen. Algunos no tienen bastante con el sueldo que cobran indebidamente en negro y hasta nos roban.