El Centro de Tratamiento de Residuos (CTR) de Valladolid afronta una nueva etapa tras la ampliación y modernización de sus instalaciones, que lo sitúan entre los complejos más avanzados del país en gestión sostenible. La actuación, inaugurada este martes por el alcalde Jesús Julio Carnero, supone un impulso decisivo hacia un modelo de economía circular real y eficiente, en el que los residuos se convierten en recursos.
Con una inversión de 43 millones de euros, el proyecto ha permitido renovar por completo la planta, inaugurada en 2002, dotándola de sistemas automatizados para la recuperación de materiales, el tratamiento de residuos orgánicos y la generación de energía limpia a partir del biogás. La instalación, gestionada por la UTE CTR Valladolid, integrada por FCC Medio Ambiente y Zarzuela S.A., garantizará el autoconsumo energético del centro y reducirá al mínimo el envío de materiales a vertedero.
Además, el Ayuntamiento y la Junta de Castilla y León han invertido 4,6 millones de euros adicionales para el tratamiento de biorresiduos, en parte gracias a los fondos europeos PRTR, con el fin de reforzar el compromiso ambiental de la ciudad.
El nuevo CTR destaca también por su eficiencia operativa y respeto ambiental, con una notable reducción de los olores que afectaban a la zona y un nuevo edificio de personal pensado para mejorar el bienestar laboral. A ello se suma un Centro de I+D en residuos que impulsará proyectos innovadores y un programa educativo, 'La Fábrica Inversa', que acercará la gestión de residuos a la ciudadanía.
Según Carnero, este proyecto "marca un antes y un después en la gestión ambiental de Valladolid, no solo por su capacidad técnica, sino porque refleja el compromiso colectivo con un futuro más limpio y sostenible".