El soterramiento volvió a estar presente en un nuevo Pleno celebrado en las entrañas del Ayuntamiento de Valladolid. En esta sesión, correspondiente al mes de septiembre, Valladolid Toma La Palabra (VTLP) alzó la voz ante la situación de parálisis que, según este grupo político, sufre la ciudad desde que el alcalde, Jesús Julio Carnero, tomó posesión. En concreto, la portavoz, Rocío Anguita, expuso las razones por las cuales Valladolid "está bloqueada con una quiebra financiera en el horizonte".

Anguita también aprovechó la ocasión para dejar claras las consecuencias que podría suponer la disolución de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad. Para la portavoz, una de las consecuencias sería urbanística porque "congelaría todas las soluciones que afectan a la permeabilidad de las vías del tren a su paso por Valladolid, ya que quedarían cancelados todos los proyectos de los pasos previstos y no se llevarían a cabo infraestructuras que en estos años se han mostrado como necesarias y que deberían formar parte del proyecto, tales como Arco de ladrillo, Daniel del Olmo, o el viaducto de la VA20 en Parque Alameda y porque tampoco se iniciaría un nuevo proyecto de soterramiento que es inviable financiera y constructivamente hablando".

"Esta disolución de la sociedad tendría nefastas consecuencias económicas para las administraciones que la componen, debido a que arrastramos una deuda de más de 400 millones de euros que habría que asumir entre las cuatro partes implicadas y que al Ayuntamiento de Valladolid le supondría hacer frente a una deuda de más de 100 millones", añade. Por su parte, el concejal de Urbanismo, Nacho Zarandona, no quiso hablar de una posible disolución, ya que es algo que tendrán que decidir, entre otras muchas cuestiones, el próximo 6 de octubre. En este sentido, el edil Víctor Martín recordó a la oposición que el exalcalde Óscar Puente se comprometió ante notario de llevar a cabo el mencionado proyecto.

El líder de la oposición, Pedro Herrero, compartió la postura de VTLP dirigiéndose a Carnero: "¿Cómo es posible que entre que Valladolid tenga una integración ferroviaria o no tenga nada, usted esté haciendo todo lo posible para que no tenga nada? ¿Cómo es posible que entre que Valladolid avance o se paralice, esté haciendo todo lo posible para que se paralice? ¿Cómo es posible que después del pufo que ustedes dejaron en su día, se atreva a seguir vendiendo el cuento del soterramiento, cuando ni siquiera es capaz de mantener las calles limpias?". 

TURNO DEL ALCALDE

El alcalde, Jesús Julio Carnero, tomó la palabra y comparó la situación vivida en Cataluña para explicar que aprobar los pasos de Ariza porque no quiere "embarcar a la ciudad a un problema constante de movilidad". "Lo que no vamos a hacer desde Valladolid es dar 560 euros a cada catalán. Nosotros hemos transitado en el año 2017 desde el soterramiento a la integración. Y ahora el deseo de los vallisoletanos es transitar desde la integración al soterramiento. Es algo necesario para la evolución de los vecinos en el corto, en el medio y en el largo plazo. Lo voy a defender hasta la extenuación", sentenció.

En cuanto a las votaciones, no salieron adelante ninguno de los puntos de la moción presentada por VTLP y sí la enmienda de VOX: "Instar al Ministerio de Transporte y Movilidad a suspender el inicio de las obras de la nueva estación de ferrocarril hasta que no se resuelva el recurso presentado por el Ayuntamiento de Valladolid relativo a la aprobación del proyecto de construcción de la remodelación de la estación ferroviaria de Valladolid Campo Grande, efectuada por ADIF-AV".