Los blanquivioletas pierden la imbatibilidad y suman la primera derrota liguera de la era Almada
El Pucela se atasca en Albacete
Los blanquivioletas pierden la imbatibilidad y suman la primera derrota liguera de la era Almada
El Real Valladolid cayó (2-0) en Albacete en un partido en el que tuvo ocasiones para, incluso, adelantarse y meter presión a su rival, pero su falta de puntería y su debilidad defensiva no le permitieron sacar algo positivo del Carlos Belmonte. Los goles de Agus Medina y José Carlos Lazo valieron a los locales su primera victoria de la actual campaña a costa de un Pucela atascado que pecó, en muchos momentos, de hacer la guerra por su cuenta y precipitándose.
GUILHERME, CLAVE
El Pucela de Guillermo Almada empezó con ganas el choque. La posesión era completamente blanquivioleta, pero las ocasiones generadas no eran suficientes. Es más, era el Albacete, con el paso de los minutos, el equipo que más probaba al portero rival, en este caso, Guilherme Fernandes. El portugués salvó hasta en tres ocasiones a los suyos para mantener vivo a un Real Valladolid que, ni con esas, despertaba.
El Albacete, que aún no sabía lo que era ganar en esta Liga Hypermotion, sufría el efecto contrario: estoy fallando mucho y, al final, lo voy a acabar pagando. De hecho, pudo ser así si no es por Raúl Lizoain que desbarató una ocasión clarísima de Víctor Meseguer al filo del descanso que pudo decantar la balanza. Era el momento idóneo para adelantarse, pero el Pucela desaprovechó lo poco que produjo durante los primeros cuarenta y cinco minutos.
POCA CONTUNDENCIA Y PERDIDAS DE BALÓN INNECESARIAS
La reanudación comenzó como acabó la primera mitad. Es decir, con Meseguer como protagonista. El centrocampista, de nuevo, tuvo en sus botas la mejor ocasión del Real Valladolid en todo el partido. Se hizo hueco en área pequeña y, cuando lo tenía todo a placer, mandó el balón fuera. No se lo quería creer un Almada desesperado con los suyos y enfadado, en más de una ocasión, porque veía que, por primera vez, corría el riesgo de acabar con la imbatibilidad.
Es más, la entrada de Peter Federico tampoco cambió el rumbo del partido, ya que el Albacete, viendo que el Real Valladolid seguía jugando con fuego, no quería volver a desperdiciar la oportunidad de salvar a su entrenador, Alberto González, que estaba, antes del choque, más que discutido. Llegado el momento, los suyos respondieron por él. Una perdida de balón del equipo de Almada propició una jugada en ataque del 'Alba' que acabó materializando Agus Medina (1-0).
A partir de ahí, el Pucela lo peleó hasta el final, pero era más con corazón que con cabeza. Las continuas intentonas no surtieron efecto y Lizoain tampoco tuvo mucho trabajo para mantener su portería a cero. Entre tanto desbarajuste y algún ida y vuelta, González agitó la coctelera y sus recambios acabaron sentenciando el choque. Lazo definió a la perfección otro 'regalo' blanquivioleta para desatar la locura en un Carlos Belmonte que presenció 'in situ' la primera derrota de Almada, que querrá redimirse en el José Zorrilla la próxima semana ante la Cultural y Deportiva Leonesa.
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