José Miguel Pérez 'Joselillo' ha demostrado que está en torero, preparado y concentrado para matar cualquier corrida de toros. Y eso que los contratos no llegan como deberían.
Pero el diestro vallisoletano entrena cada día como si tuviera el compromiso más complicado de su carrera. De lo contrario no se explica que este domingo recibiera a las 10 de la mañana una llamada para una sustitución de urgencia en Tudela (Navarra) y horas después abandonase el coso en volandas, tras un actuación rotunda en el que ha cortado tres orejas. Joselillo, sin apenas tiempo, preparó el esportón y viajó a la localidad navarra de Tudela donde le estaban esperando dos imponentes Prieto de la Cal.

Compartió terna con El Audureño y David Cadavid en una calurosa tarde con un tercio de entrada.

Como las oportunidades están para aprovecharlas, José Miguel Pérez no iba a dejar pasar el tren y cerró su maciza intervención con tres trofeos.

En el primero, Joselillo se enfrentó ante un complicadísimo astado que no ofrecía demasiadas posibilidades. Pero el vallisoletano tiró de oficio, tragó lo que no está escrito y a base de pundonor y valor arrancó una más que meritoria oreja.

El segundo fue otra cosa. Con movilidad y tranco, aunque sin regalar nada, permitió desplegar toda su tauromaquia. Le entendió a la perfección y logró hilvanar series muy templadas y largas por ambos pitones. Se le vio en plenas facultades al torero de Valladolid, quien firmó un trasteo de mucho mérito. Tenía las orejas en la mano, pero había que rubricar la obra: se volcó entre los pitones y logró una estocada que hizo que el triunfo fuera sonado. Paseó los dos trofeos en una tarde inolvidable que horas antes no se hubiera imaginado ni por asomo.

Sale reforzado de su cita exprés en Tudela y ya prepara su siguiente compromiso: Tafalla, el 15 de agosto, en un bonito cartel con Miguel Tendero y Lama de Góngora ante astados de José Luis Pereda.