La boxeadora vallisoletana, Isa Rivero, conocida como 'La Finita', ha pasado a la historia del boxeo español. Hace una semana que se proclamó campeona mundial de peso átomo tras derrotar en un intenso combate a la mexicana Silvia Torres. Aún con la emoción en la piel, Isa, no termina de asimilar todo lo que está viviendo estos días, en los que, a pesar de lograr el título, ha tenido que volver a su trabajo.

En esta entrevista concedida a TRIBUNA, la púgil repasa cómo ha sido la preparación del combate, los sacrificios y "madrugones" que ha tenido que hacer para lograr su objetivo, los momentos previos y la enorme emoción que siente después de lograr el campeonato.

PREGUNTA: En primer lugar, enhorabuena por lo que ha conseguido, ganar un campeonato mundial,  y hacerlo en su tierra, ante su gente. ¿Cómo está viviendo estos días después de convertirse en campeona del mundo?

RESPUESTA: Estoy como en una nube. Todavía no lo he asimilado, no lo he gestionado. Creo que tardaré un tiempo, pero sí que es cierto que, como también he tenido que volver al trabajo, es una situación un poco extraña. Tengo lo ocurrido en la mente, pero al final tengo que seguir con mi día a día... Es un poco raro.

P: ¿Cómo son los días antes del combate y esos minutos previos antes de subirse al ring? ¿Hay nervios?

R: Los días anteriores, como he estado sin trabajar, he estado muy centrada, no he tenido tantos nervios y he estado más focalizada en la pelea. Los momentos previos al combate siempre son de mucha tensión, de muchos nervios y sí que es cierto que esta vez, antes de subir al ring, estaba como mucho más motivada. Me imagino que obviamente sería cuestión de que era un título mundial. Normalmente siempre estoy con muchas ganas antes de subir al ring y diciendo siempre 'quién me mandaría a mí estar aquí', pero esta vez no, esta vez tenía muchísimas ganas de subir y de hacerlo bien.

P: Durante el combate, ¿sentía que era suyo o veía que se le escapaba en algún momento? 

R: La verdad que yo lo vi bastante bien en general, es cierto que hay asaltos que gano yo y hay asaltos que gana ella, entonces sí que es cierto que en alguno veía que se me escapaba. En cualquier caso, me sentía a gusto y me sentía tranquila porque veía que lo estábamos haciendo bien.

Veíamos que estábamos conectando más golpes, llegábamos bien y estábamos esquivando los de ella. El planteamiento me gustó como salió en general, estaba tranquila y contenta mientras estaba encima del ring. Lo veía bastante claro.

P: Dijo en su presentación del combate que tenía una presión extra al combatir en Valladolid, en su tierra. ¿Fue así o sentía que el público le llevó en volandas? 

R: Antes de salir, dices, 'jolín, quiero hacerlo lo mejor posible' y claro, te viene esa tensión de querer hacer las cosas para que la gente lo disfrute. Luego cada vez que la cúpula me animaba, para mí era un extra, era como un empujón. Instantes antes me supuso una presión, pero luego me sentí súper arropada y súper a gusto.

P: En el momento en el que termina el combate y dicen su nombre, ya sabe que es campeona mundial. ¿Qué se siente en ese instante? 

R: Me puse a llorar. No sabía exactamente ni qué decir, ni nada. Es el resultado de tanto esfuerzo, de tantas horas, de tantos kilómetros, de tanto tiempo invertido, de todo. Es como una liberación decir, 'lo he conseguido'. Hay mucha gente que también se esfuerza mucho pero no lo consigue, y yo he tenido la suerte de lograrlo. Yo lloraba de felicidad, era un agradecimiento por haber podido vivir todo esto, y por haberlo conseguido.

P: Ahora que ya posee el cinturón, ¿cómo se siente al tenerlo en las manos? 

R: Todavía no lo he asimilado, por mucho que lo vea, no me doy cuenta. Hay veces que lo intento interiorizar y me sale una sonrisa, y hay veces que veo el cinturón y todavía no me doy cuenta de las cosas. Es una situación muy extraña.

P: ¿Ha sido duro el camino para llegar hasta aquí, hasta conseguir lo que ha logrado?

R: Sí, ha sido muy, muy duro. Es cierto que ha sido bastante rápido, porque hay gente que invierte muchísimos más años en esto. He tenido que dejar muchas cosas atrás, dejar a muchas personas, invertir mucho tiempo, mucho dinero...

P: Decía también que compagina el boxeo con su trabajo, ¿cómo lo gestiona? 

R: Madrugando mucho y durmiendo poco. Al final tienes que madrugar mucho para entrenar por la mañana. Además, yo estoy siempre en horario partido, con lo cual estoy todo el día en el trabajo. Cuando salgo, entreno y doy las clases a los niños, entonces hay que organizarse muy bien, hay que ser súper metódico y súper disciplinado porque si no sería imposible.

P: Después de haber logrado el campeonato, ¿esto le va a poder permitir vivir del boxeo?

R: Imposible. Estoy de nuevo en el trabajo. Es imposible vivir del boxeo, y para una mujer más aún. En España, incluso para los hombres es muy complicado. Tampoco hay apoyo de las televisiones, no hay grandes patrocinadores... Si es muy difícil ya sacar adelante una velada, imagínate poder vivir de ello.

P: ¿Cree que con lo que ha conseguido, le han dado más visibilidad tanto a usted como al boxeo femenino?

R: Yo creo que sí, además creo que estamos en una época muy buena. De hecho, esta semana hay dos campeonatos de Europa de chicas aquí en España, uno en Madrid y otro en Zaragoza, y ha habido un campeonato de España en Baleares la semana pasada. Hay muchísimo movimiento. Creo que cada vez se le está dando más visibilidad y se le está dando más importancia que, al final, nosotras también tenemos que entrenar como los hombres y luchar como los hombres para poder hacer algo.

P: ¿Qué mensaje le diría a todos aquellos que quieran dedicarse al boxeo?

R: Les diría que si quieren intentarlo, tienen que hacerlo con el corazón, tienen que hacer todo lo posible. Dedicarse realmente a esto es muy complicado, pero si les llena y les motiva, que lo hagan sin mirar atrás. Practicar cualquier deporte es una base fundamental para los niños, ninguno debe dejarse guiar por estereotipos ni por etiquetas, que si a un niño le apetece hacer patinaje artístico, que lo haga, no hay que dar cuentas ni explicaciones. 

P: Este fin de semana le van a hacer un homenaje en el estadio José Zorrilla, ¿cómo se siente?

R: Muy emocionada. Yo he sido muchos años socia del Real Valladolid y me gustaba mucho ir al campo, aunque hiciera frío. Estoy muy agradecida y muy emocionada, tanto por el Real Valladolid como por todas las instituciones que me están recibiendo. Están contando conmigo y me siento súper querida y súper arropada por la ciudad.

P: Por último, ¿cómo ve su futuro tras ser campeona mundial? ¿Va a querer defender el título o tiene en mente cambiar de peso?

R: Cambiar de peso no, porque hemos luchado mucho para poder hacer estas peleas en el átomo. Es mi peso natural y no quiero volver atrás. Después, ya defensas o unificaciones, lo marca mi manager, Kike Soria, es el que maneja todo. El boxeo es un deporte que me gusta mucho y nunca hemos dicho que no a una pelea.