La 19ª etapa de La Vuelta a España tomó la salida este viernes desde la localidad vallisoletana de Rueda rumbo a Guijuelo (Salamanca), en una jornada sin incidencias deportivas en el arranque pese a las protestas registradas en los prolegómenos.

Un grupo de unos 30 activistas propalestinos se concentró de nuevo en la salida, portando banderas y kufiyas, como ya ocurrió en etapas anteriores. La manifestación se desarrolló de forma pacífica y no alteró el normal inicio de la competición.

El corte de cinta, que simboliza el comienzo de la etapa, contó con la presencia del presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar; la delegada territorial de la Junta en la provincia, Raquel Alonso; y el director general de Deportes de la Junta, Enrique Sánchez-Guijo.

La contrarreloj de Valladolid, marcada por las protestas

La Vuelta volvió a colocar a Valladolid en el mapa ciclista mundial esta semana con la disputa de la contrarreloj individual, una etapa clave que atrajo a miles de aficionados a las calles de la capital. Sin embargo, la jornada también estuvo acompañada por movilizaciones propalestinas, que reunieron a centenares de personas en el centro de la ciudad para reclamar un alto el fuego en Gaza y rechazar la presencia de un equipo de Israel en la competición.

Pese a la tensión en algunos momentos, la contrarreloj se desarrolló con normalidad y dejó imágenes espectaculares del paso de los corredores por enclaves emblemáticos de Valladolid, consolidando a la ciudad como uno de los escenarios destacados de esta edición de la ronda española.