En Castilla y León habría hasta una decena de individuos implicados
Cae un grupo criminal con sede en Málaga que robó en viviendas de Valladolid, Burgos y León
Los hombres detenidos, junto con una mujer de 28 años, contaban con antecedentes por hechos similares
La Ertzaintza y la Policía Nacional han desarticulado un grupo criminal que robado hasta en 70 ocasiones en diferentes puntos de España, entre ellos Burgos, León y Valladolid, en una operación en la que se han realizado tres detenciones. Los hombres detenidos, de 46 y 28 años, junto con una mujer de 28 años, contaban con antecedentes por hechos similares y fueron puestos a disposición de Juzgado de Instrucción de Guardia de Fuengirola, quien decretó el ingreso en prisión de uno de los hombres y la puesta en libertad con cargos de la mujer, además de la continuidad en prisión del tercero.
La investigación comenzó de forma independiente en ambos cuerpos policiales si bien tras detectar la misma forma de actuar en robos en los que se llevaban artículos con idénticas características, se inició una actuación conjunta coordinada a través del C.I.T.C.O (Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado), que ha permitido desenmascarar a los autores de más de 70 robos y recuperar gran parte de los objetos robados.
La Ertzaintza y la Policía Nacional establecieron un cerco sobre dos ciudadanos extranjeros que resultaron sospechosos, ya que vivían en Málaga pero se movían por diferentes ciudades de España. Éstos mantenían conexión con una mujer, pareja sentimental de uno de los principales sospechosos. Los agentes establecieron un dispositivo de vigilancia de esas tres personas que se saldó con las detenciones de uno de los dos hombres y de la mujer en los domicilios de ambos, en la localidad malagueña de Fuengirola.
Los investigadores han concluido que actuaban en "una organización con una estructura bien diseñada que contaba con jerarquía, en donde su cabecilla estaba especializado en la apertura de todo tipo de puertas de acceso a las viviendas" usando "taladradoras potentes con brocas especiales" que perforaban los bombines de las cerraduras. Con la detención de estos tres delincuentes, la Ertzaintza y la Policía Nacional, han conseguido desarticular un grupo criminal muy activo y esclarecer 70 robos con fuerza, 33 han sido resueltos gracias al descubrimiento de ADN en el lugar de los hechos.
Una de ellas accedió a los pasillos y las otras dos esperaban fuera sin pasar, en ningún momento, por la línea de cajas
Facilitó un número de cuenta diferente a la empresa a través de un correo electrónico que contenía una factura dirigida a una trabajadora
Las sustancias intervenidas habrían incautado en el mercado ilícito un valor de cerca de 2.300 euros