La instructora del caso Esther López, la joven de Traspinedo desaparecida el 13 de enero de 2022 y localizada sin vida 23 días después en una cuneta, comunicará en un máximo de tres días si el procedimiento pasa a juicio oral con jurado popular contra el único investigado, Óscar S.M. La decisión llegará tras la audiencia preliminar celebrada este miércoles, un trámite rápido ,apenas catorce minutos, en el que ninguna de las partes modificó sus planteamientos.

Durante la vista, el Ministerio Fiscal mantuvo su solicitud de 18 años de prisión, mientras que los padres de la víctima elevaron su petición a 39 años, al atribuir al acusado, además del asesinato, otros delitos como detención ilegal, omisión del deber de socorro, conducción temeraria y atentado contra la integridad moral. La hermana de Esther reclama 35 años.

La defensa de Óscar insistió en que no existe base probatoria suficiente para sostener una acusación de este calado y criticó que se afronte un posible juicio con jurado "con unos indicios mínimos". Las letradas recordaron que han recurrido la negativa de la jueza a practicar varias diligencias que consideran esenciales y señalaron que dichas pruebas ,como el acceso completo a las fotografías de la autopsia guardadas por la UCO, no retrasarían el procedimiento, puesto que ya están en poder de la Guardia Civil.

También remarcaron que siguen pendientes de admisión otras dos solicitudes: un informe sobre un segundo teléfono vinculado a la víctima y un estudio dirigido a la Junta de Castilla y León para determinar si el cuerpo presentaba signos coherentes con haber permanecido tres semanas en el exterior en un entorno con abundante fauna. Hasta el momento, ninguna de estas diligencias ha sido aceptada.

Las abogadas denunciaron además la situación personal de su cliente, que ,según explicaron, acumula cuatro años de "acusaciones infundadas" y tuvo que soportar nuevamente insultos y amenazas al acudir a los juzgados.

Mientras se celebraba la audiencia, amigos y familiares de Esther se concentraron en la puerta de los juzgados de la calle Angustias para reclamar justicia y arropar a la familia.

El núcleo de las acusaciones se apoya en el informe de la Guardia Civil, que reconstruye la última noche de Esther: una discusión en la vivienda de Óscar, la salida de la joven a pie y un posterior atropello en las inmediaciones de la urbanización El Romeral, del que el acusado no habría dado aviso, pese a que, según los investigadores, una llamada al 1-1-2 podría haber cambiado el desenlace. El informe sostiene que horas después Óscar habría trasladado el cuerpo hasta la cuneta donde finalmente apareció.

Las acusaciones se sustentan principalmente en el informe de la Guardia Civil, que sostiene que la noche del 13 de enero de 2022 Esther y Óscar fueron juntos a la vivienda de él, donde se produjo una discusión que llevó a la joven a marcharse a pie. Con base en la geolocalización de los teléfonos móviles, el Instituto Armado concluye que Óscar habría arrollado a la joven en las inmediaciones de su casa, en la urbanización El Romeral de Traspinedo, sin alertar al 1-1-2, algo que ,según los informes, podría haberla salvado. Horas después, ya fallecida, Óscar habría trasladado el cuerpo hasta la cuneta donde fue hallado.