El Real Valladolid cayó en la tanda de penaltis ante el Estrela da Amadora en un partido (2-2) enmarcado en un Trofeo Ciudad de Valladolid descafeinado por el día, aforo y rival. Es más, el Club notificó que tan solo 2.791 personas presenciaron en directo el choque, y con razón, ya que el encuentro, el contexto y los últimos resultados no invitaban a pasar frío en el José Zorrilla, vestido con las mejores galas... posibles.

INICIO POCO INTENSO Y REACCIÓN CON GOLES

El Pucela empezó con dudas el encuentro. A eso se sumó la poca intensidad de los de Guillermo Almada que despertaron con el paso de los minutos. De hecho, el Estrela da Amadora también estaba poniendo de su parte para que el partido fuera más desangelado de lo normal. Aun así, los locales eran los únicos que, al menos, proponían algo, poco, pero algo. En el momento en el que Iván San José 'Chuki', Sergi C. Tenés, y Mathis Lachuer entraron más en juego, el Real Valladolid generó más peligro. 

Se vio en una recuperación de Lachuer, en una intentona de Tenés y en un gran disparo de 'Chuki', este último rechazado por Renán Ribeiro, que hizo una gran estirada para evitar el tanto. Minutos después, el Pucela se adelantó en el marcador, aunque ya lo había hecho 'Arnu'... en fuera de fuego. Un error en la salida de balón del Estrela da Amadora facilitó la recuperación de los blanquivioletas que, a través de Tenés, estrenaron el electrónico. El '7' superó a Renán con un disparo cruzado (1-0).

Con el marcador a su favor, el Pucela se soltó un poco más hasta el punto de que Javi Sánchez puso tierra de por medio con un cabezazo al fondo de la red (2-0) tras un gran centro de Chuki en una acción a balón parado. Sin embargo, cuando parecía que el marcador no se iba a mover, un gol de Ianis Stoica puso algo de picante al partido (2-1) tras un fallo de Trilli en el marcaje. Además, el lateral tiró mal la línea de fuera de fuego.

ERRORES QUE SIGUEN COSTANDO GOLES

La reanudación mantuvo el guion del partido. Un Pucela, menos intenso si cabe, tenía la aparente intención de sentenciar el partido ante un Estrela da Amadora que estaba muy metido en el choque. Es más, Ribeiro solventó dos mano a mano ante Tenés y Arnu. Ambos estuvieron a punto de poner el tercer tanto, pero no sortearon al cancerbero. Mientras tanto, y con cambios previsibles, otra vez, el encuentro seguía en un puño.

De hecho, el equipo de Almada estaba jugando con fuego con fallos intolerables, que no se pueden cometer, aunque el uruguayo diga que los suyos tienen que aprender de los mismos, pero parece que no se cansan de hacerlos. Esta vez fue Jaouab que, en una mala salida de balón, regaló el mismo a los atacantes del Estrela, que se la dieron a Antonetti, que no perdonó (2-2). Almada agitó la coctelera, metió a varios titulares, pero de nada sirvió porque su equipo sigue igual: con centros laterales y remates sin peligro alguno.

La tanda de penaltis fue, finalmente, la que decantó el choque con los fallos de Poncaeu y de Juric (este mandó el balón a la grada), ante un Estrela que acertó todas las intentonas que tuvo. El Trofeo Ciudad de Valladolid ya tenía dueño: un conjunto portugués que acertó cuando el partido así lo requería. Por su parte, los de Almada afrontan ante la Real Sociedad B un encuentro que, como vuelva a cometer los mismos fallos, se irá de vacío... como hoy en Zorrilla.