Todo esfuerzo tiene su recompensa. O al menos eso es lo que se suele decir. El ejemplo de Jaime Bajo deja muy claro que quien la sigue la consigue. Y es que el estudiante del doble grado en Física y Matemáticas de la Universidad de Valladolid (UVa) ha recibido la Beca de Excelencia 360º que la institución, en colaboración con el Banco Santander, concede anualmente.

Esta beca, que va más allá de los criterios académicos, basados habitualmente en el expediente académico y las notas, pone en valor las actividades complementarias relacionadas con la vida universitaria como la internacionalización o los intercambios.

Jaime Bajo, natural de Ciudad Rodrigo, está finalizando el quinto curso del Programa de Doble Titulación de Grado en Física y Matemáticas con una media en su expediente de 9.894; ha formado parte del equipo ganador de la Liga Matemática Nacional y del equipo representante de la UVa en la final internacional de Plancks; y disfrutó el pasado curso 2023/2024 de un intercambio Sicue, factores que le ha llevado a alzarse como el alumno más excelente de la Universidad de Valladolid y conseguir la Beca de Excelencia 360º, dotada con un total de 12.000 euros.

El joven mirobrigense es un apasionado de las ciencias, como demuestra toda su trayectoria académica. Jaime ya venía destacando desde antes incluso de comenzar sus estudios universitarios. En Bachillerato se alzó con dos oro en las olimpiadas Nacional e Iberoamericana de Física y con otro oro en la Olimpiada Nacional de Química. Ya como alumno de la Universidad de Valladolid ha conseguido numerosos éxitos como el mejor puesto de un equipo español en Plancks, el primer puesto en la Liga Matemática o mejor expediente del año.

P: ¿Cómo tomó la decisión de estudiar en Valladolid?
R: Cuando llegó el momento de decidir sobre mi futuro, mi hermana mayor se encontraba estudiando Medicina en Valladolid. Quise venir aquí a vivir con ella y a estudiar el doble grado. Desde que empecé el instituto, he tenido una gran predilección por la Física. Descubrí una imagen en un libro en la que venían todas las diferentes escalas del universo representadas. No tenía ni idea de qué era nada pero empecé a investigar y ahí nació mi pasión. En cuarto de la ESO, mi profesor Alfredo me convenció para hacer el doble grado también con Matemáticas porque era una opción muy interesante. La nota de selectividad me permitió estudiarlo y acabé en Valladolid.

P: ¿Cómo ha sido su experiencia durante estos cinco años en la Universidad de Valladolid?
R: Me ha encantado estudiar en la UVa. Lo mejor ha sido el buen ambiente y el compañerismo que existe en la Facultad de Ciencias. No solo en este doble grado, sino en general. Nos conocemos todos, nos ayudamos y colaboramos para resolver dudas. Sin mis compañeros no habría sido nada igual. Mis notas son, en parte, gracias a ellos. Me llevo de la UVa ese espíritu de equipo. No existe la competitividad, trabajamos todos juntos para conseguir una meta común.

P: ¿Qué le espera el curso que viene?

R: Voy a intentar ahorrar el máximo posible, que el año que viene quiero cursar un máster en el ETH de Zúrich y aunque voy becado la vida en Suiza es muy cara. Para ello, he conseguido también una de las cien becas que la Fundación La Caixa otorga para realizar estudios de posgrado en el extranjero.

P: ¿Qué expectativas tiene del curso que viene?
R: Es una de las mejores universidades del mundo. Tengo muchas ganas. He oído hablar muy bien de los profesores y las clases. A pesar de ser una institución muy grande, las clases son relativamente pequeñas. Va a ser una experiencia en la que voy a aprender muchísimo.

P: ¿Cómo recibió la noticia de que le iban a dotar con la Beca de Excelencia 360º?

R: Fue curioso. La resolución salía el día 16 de junio pero salió antes en Valladolid y yo no me enteré. Recibí un correo electrónico del profesor Jorge Mozo, antes de yo saber nada, dándome la enhorabuena. Mi respuesta fue preguntarle que porqué me estaba felicitando porque yo, aun no sabía nada.

P: ¿Qué significa para usted esta beca?

R: Esta beca es una recompensa enorme al trabajo de estos últimos años. Al final durante toda la carrera he tenido que estudiar mucho y que esforzarme para conseguir tener un buen expediente y que me den esta beca es un reconocimiento enorme. Además, va a ser una ayuda increíble para mi siguiente etapa en el máster.

P: ¿Cree que es digno merecedor de la beca?
R: Supongo que si me la han dado es por algo. Aun así, es cierto que muchas de las personas que la habían solicitado cuentan con unos expedientes magníficos y unas trayectorias increíbles. Sergio, un gran amigo mío, estaba en la lista de espera y considero, personalmente, que también se la merecía. Me alegro de que me hayan seleccionado a mí pero hay muchos compañeros a mi alrededor que son, verdaderamente, brillantes.

P: ¿Qué consejo le daría a alguien que quiera seguir sus pasos universitarios?
R: Le explicaría que va a ser un camino duro, que requiere esfuerzo pero que merece la pena. Hay mucha carga de trabajo pero también es muy bonito. Es importante tener vocación y que te guste a lo que te estás dedicando. Si te esfuerzas, día a día, lo puedes disfrutar.

P: ¿A qué le gustaría dedicarse en un futuro?
R: Quiero dedicarme a la investigación. Me apasiona el mundo de las Matemáticas y sería súper feliz de trabajar en este mundo. Habrá que estar atento a las oportunidades que vayan surgiendo para poder cumplir mi sueño.

P: ¿Cree que es importante que existan este tipo de becas estudiantiles?
R: Totalmente. Yo no podría cursar el master que empezaré este próximo curso en Suiza, si no contase con las dos becas que me han concedido. Es muy necesario. Además sirven para motivarte y focalizarte en el estudio.