El Fundación Aliados cayó en cuartos de la Copa del Rey de Baloncesto en Silla de Ruedas, al perder de manera contundente ante UCAM Murcia, que supo aprovechar a la perfección la importante baja de Adrián Pérez en las filas vallisoletanas, para hacerse dueño y señor de la pintura, con Lalo Prieto y Fryer como protagonistas, a los que no supo frenar la defensa morada.

Estaba claro que el reto se presentaba complicado para los de José Antonio de Castro, sin su pieza más determinante y experimentada, Adrián Pérez, pero el equipo salió con la firme intención de competir al máximo, con un soberbio Paco García Quiles, que se erigió como principal valedor en el plano ofensivo, a lo que se añadió una buena defensa en la primera mitad, que amarró a los lanzadores murcianos. De ahí que se llegase al final de la primera mitad con un apretado 34-33 en el marcador.

Pero, tras la reanudación, el UCAM apretó en defensa, dejando sin ideas al cuadro vallisoletano, y además mostró una mejor movilidad y un juego más fluido, que obligó a la defensa rival a emplearse a fondo. Esto se tradujo en que pronto se alcanzó el bonus, con más opciones de tiro para UCAM, y que Joaquín Robles y García Quiles, dos de los jugadores destacados del encuentro, acumularan faltas demasiado pronto. Lalo se convirtió en una verdadera pesadilla para la defensa visitante, demostrando su calidad en los lanzamientos, para dejar el tanteo en un 53-46 al término del tercer cuarto.

El Fundación Aliados iba perdiendo fuelle, acumulando errores en los tiros y, sobre todo, bajando el nivel defensivo de manera considerable tras ese desgaste inicial, mientras que los locales parecían adquirir más impulso, gracias a sus ametralladoras. Porque, aunque Fryer fue eliminado a falta de seis minutos, tomó el relevo anotador Arinn Young para terminar de rematar al equipo vallisoletano, que al final se dejó llevar para terminar perdiendo por 19 puntos (78-59).