"Mis perros son mi familia y desde que no los tengo conmigo, no le veo sentido a nada". Esas son las primeras palabras de Edu, un hombre que lo ha perdido todo y que su única familia eran sus perros que, desde el día 5 de enero, ya no están con él por culpa de unas denuncias por un supuesto maltrato animal.

Los problemas comenzaron con la muerte de su pareja. Su mujer falleció fruto de una larga enfermedad y el padre de Nara y Mesi se vio envuelto en una depresión que le dificultó llevar una vida normal durante algún tiempo: "Los animales fueron piezas fundamentales en la recuperación de mi depresión. Los perritos me cuidaban mucho y me hacían compañía cuando me quedé solo".

Edu vive en la calle desde marzo de 2020, cuando perdió su casa y tuvo que hacer frente a una nueva y difícil situación en medio de una pandemia mundial y de un estado de alarma por la epidemia del Coronavirus.

Sus destrezas y el aprendizaje que adquirió cuando fue Scout le permitió desenvolverse bien en su nueva situación y quiso adaptarse "lo mejor posible" a las nuevas condiciones que eran poco favorables pero a las que consiguió adaptarse.

Los problemas parecen no tener fin para él que ahora ha perdido a su "única familia" con este último varapalo que ha supuesto su separación de los que considera sus hijos desde hace ya nueve años: "Ellos han estado siempre conmigo, desde que los adopté hasta ahora. Y por supuesto que cuando las cosas se pusieron difíciles me acompañaron, pero es que solo nos tenemos los unos a los otros".

El momento de la despedida

"Yo estaba colaborando con la Asociación Amigos del Pisuerga, de la que soy socio desde hace tiempo", explica el entrevistado a Tribuna Valladolid. Fue la tarde del pasado 5 de enero cuando le notificaron que tenía varias denuncias por maltrato animal, lo detuvieron y se llevaron a los dos canes.

Desde ese momento, Edu vive una auténtica pesadilla y solo quiere volver a reunirse con ellos: "Son mis perros, yo los quiero mucho y nunca haría nada que los pudiese herir".

Recuerda la Noche de Reyes como una situación muy triste pero asegura que la Policía lo trató "muy bien" y no le pusieron problemas: "No me pusieron las esposas, los acompañé y me lo hicieron fácil. Estaría en la Comisaría unos 40 minutos y después me dejaron marcharme".

Ahora le preocupa que los animales no entiendan la situación o estén asustados: "La última imagen que tengo de Nara es de ella, llorando desconsolada, dentro de una furgoneta entre rejas".

"No voy a parar hasta recuperarlos"

Edu se queja de la "falta de información" con la que vive desde que lo separaron de sus mascotas y explica que es "muy complicado" defenderse sin saber de qué se le acusa exactamente.

Jura que cualquiera que lo conozca sabe que nunca les haría nada malo a sus pequeños: "Muchas veces me he quitado de comer porque comiesen mis perros. Imagínate que alguien pueda pensar que los maltrato".

Aun con todas las dificultades vividas, el sintecho no se rinde y continúa con su lucha para conseguir lo que realmente quiere: "Quiero saber qué he hecho mal para poder solucionarlo. Y si, realmente, ha sido mío el error, lo aceptaré y seguiré adelante sin ellos. Pero necesito entenderlo".

El vallisoletano agradece las ayudas que está recibiendo de asociaciones como Cáritas Diocesana, Cruz Roja Valladolid o Red Íncola en todo el proceso, a través de asesoramiento legal y apoyo psicológico.