El VRAC Quesos Entrepinares se impuso este sábado al Belenos en un duelo en el que los queseros pusieron fiabilidad e inteligencia (0-31) para superar en su cancha a un rival que lo puso más difícil de lo que resultado final puede indicar. Especialmente en una primera parte dura en la que los locales plantaron cara y en la que el VRAC tuvo dificultades para adaptarse al rival y al césped artificial, si bien poco a poco los azulones, de rosa para la ocasión, fueron llevando con calma y frialdad el choque a su terreno para terminar ganándolo con pleno de puntos.

Pese a que el comienzo del encuentro dejó un juego abierto y de ida y vuelta, con alternativas para ambos equipos, fue el VRAC el que comenzó dominando en las estáticas y en el marcador. De una melé nació el primer ensayo quesero, tras una buena irrupción de Ewart Potgieter, con el sudafricano leyendo a la perfección la carrera de Arnau Andrés, que ensayó bajo palos para, con la transformación de Javi López, establecer el 0-7 inicial.

Volvió el duelo a dejar opciones abiertas para ambos conjuntos, con un VRAC que cerca estuvo de firmar la segunda marca. Los avilesinos fueron creciendo con el paso de los minutos, ganando confianza en una melé que inicialmente parecía decantarse a favor del Quesos. Durante varios minutos, en las gradas del Yago Lamela se cantó el ensayo local, pero una dura defensa de los de Merino, que les costó incluso la tarjeta amarilla a Potgieter y la consecuente inferioridad numérica, permitió salir vivo al Entrepinares. Ni siquiera con un castigo consiguió estrenar su casillero Belenos, dándole oxígeno al VRAC antes del descanso. Pese a ello, la incomodidad marcaba los 40 primeros minutos de partido en los vallisoletanos, que desaprovecharon un golpe a favor al borde del intermedio.

La segunda parte arrancó con un VRAC voluntarioso, haciendo gala de su favoritismo y de su físico, lo cual fue decantando la balanza para llevar la victoria a Valladolid, no sin dificultades. Tras apagar un arreón de los asturianos, el Quesos dispuso de una 'touch' a pocos metros de zona de marca en la que aprovechó para armar un 'maul' letal que finiquitó Moala, esta vez sin transformación con el pie de Javi López. Pocos segundo después, y de nuevo naciendo desde la 'touch', el VRAC combinó con cierta facilidad a la mano hasta encontrar una larga carrera de Martiniano Cian, que entre aplausos de su anterior afición se fue al suelo a placer para lograr el tercer ensayo de la ya oscura tarde en el Yago Lamela. El cuarto, con los dos equipos sabedores de cuál sería el desenlace del partido, lo puso Miguel Lainz, con patada acertada de Javi López para el 0-26. Y el quinto, a modo de guinda, Pablo Miejimolle.