El entrenador del Real Valladolid, Guillermo Almada, advirtió este jueves de que el equipo viajará a El Alcoraz en una semana "especialmente complicada". Varios jugadores han sufrido un proceso gripal que ha condicionado la preparación del encuentro y algunos no podrán participar. Entre las ausencias confirmadas se encuentran Lachuer y Alani, mientras que otros futbolistas se mantienen como duda. Marcos André, pese a su evolución, tampoco llegará a tiempo.

El técnico uruguayo subrayó la importancia del próximo encuentro para recuperar el rumbo competitivo. "Necesitamos reencontrarnos con la victoria, no solo por la clasificación, sino por el estado anímico del grupo", señaló. Almada hizo hincapié en que la juventud del plantel dificulta la gestión de la ansiedad, "sobre todo cuando se están haciendo muchas cosas bien sin obtener los resultados deseados".

Destacó que el equipo mantiene un buen nivel de juego y un compromiso "incuestionable", aunque admitió que la falta de acierto en las áreas sigue siendo la asignatura pendiente. Por el momento, no contempla movimientos en el mercado de invierno, aunque reconoce que "un refuerzo sería bienvenido si el club puede asumirlo".

El cuerpo técnico continúa trabajando en la mejora del balón parado, tanto en fase ofensiva como defensiva, una de las obsesiones del entrenador. Asimismo, cada partido requiere un análisis táctico específico para decidir si los extremos deben actuar abiertos o en zonas interiores, como ocurrió con Peter ante la Real Sociedad B, donde firmó un gol desde una posición más centrada.

Almada insistió en que nada se deja a la improvisación, aunque recordó que el éxito depende también de la capacidad de sus jugadores para interpretar el juego en cada acción. Preguntado por Meseguer, ahora suplente, explicó que la buena conexión entre Ponceau y Juric ha favorecido el cambio en el centro del campo y animó al canario a aprovechar sus próximas oportunidades.

Sobre el rival, el técnico blanquivioleta elogió la evolución del Huesca tras la llegada de Jon Pérez Bolo. "Es un equipo intenso, muy sólido atrás y peligroso en las transiciones. Tiene futbolistas experimentados en todas las líneas", advirtió.

Debido a la distancia del desplazamiento, la plantilla adelantará su viaje para realizar un entrenamiento en tierras oscenses y afrontar el duelo en las mejores condiciones posibles, con la vista puesta en un triunfo que les permita dar un giro a la dinámica actual.