En España, se modifica la hora dos veces al año desde 1974. A pesar de ser una medida instalada desde hace décadas, sigue generando debate. Pedro Sánchez, presidente del país, ha manifestado su interés de eliminarla de cara al próximo año 2026, algo que debe negociar con la Unión Europea. Sin embargo, esta no es la primera vez que se intenta.

La Comisión Europea ya planteó la posibilidad de suprimir el horario estacional en 2018, ofreciendo a cada país la oportunidad de decidir si mantener el de verano o el de invierno de forma permanente. Sin embargo, la falta de consenso no permitió que esto saliera adelante.

Estas semanas, el Gobierno vuelve a poner este debate sobre la mesa. Expertos en cronobiología declaran que mantener el horario de invierno puede mejorar el sueño y el rendimiento.

TRIBUNA ha salido a las calles de Valladolid para conocer la opinión de su población sobre el cambio de hora, cómo les afecta y si están a favor de erradicarla. La mayoría de las respuestas revelan que los vallisoletanos prefieren que la supresión de esta medida se haga efectiva lo más pronto posible. "Iba a decir que opino lo mismo que Sánchez", bromeaba uno de los encuestados.

Uno de los argumentos más escuchados ha sido el de "volver a casa a las nueve y ya sea de noche", tal y como explica una estudiante del turno vespertino "se te quitan las ganas de estudiar". Muchos vallisoletanos afirman que el cambio de horario les afecta, sobre todo por la disminución de las horas de luz.

Por otro lado, existen otros pocos que opinan exactamente lo contrario."Que nos la dejen como siempre, como está", declaraba uno de los encuestados. Algunos, por costumbre, declaran que quieren mantener esta medida tal y como está.

Hasta saber si este año será el último en el que España no compartirá horario con Portugal o Reino Unido, como cada octubre, la noche del sábado 25 al domingo, en todo el país, a las 03.00 de la madrugada volverán a ser las 02.00, lo que se transformará en una hora hora más de sueño.