Durante más de un siglo, entre 1904 y 2014, el acuartelamiento de la Rubia, en Valladolid, con casi once hectáreas, esto es unos once campos de fútbol, sirvió de instalación al Ejército de Tierra, un espacio que a final de mes o en octubre pasará a manos del Ministerio de Vivienda para poder acoger unas 300 viviendas, 200 de ellas públicas y asequibles y el resto de gestión privada.

La ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, junto a los ministros vallisoletanos, Ana Redondo, en Igualdad, y Óscar Puente, exalcalde y titular de Transporte, han visitado este viernes los terrenos del abandonado acuartelamento donde se construirá ese nuevo proyecto de vivienda pública.

Los suelos son de Defensa aunque en la próxima reunión del Consejo de Administración de la empresa entidad pública de vivienda, antiguo Sepes, a final de me o principios de octubre, se decidirá el acuerdo de comprar estos terrenos al Ministerio de Defensa, por valor de algo más de ocho millones de euros, para "poder construir sobre ellos vivienda pública y vivienda asequible", esto es que no supongá más del 30 por ciento de la renta de las familias, ha detallado Rodríguez.

"Es una muy buena noticia para una ciudad en crecimiento, donde también el problema de la vivienda es una prioridad para nosotros, dando respuesta a la ciudadanía. Es un acuerdo muy importante en el que se consolida o en el que confluyen la política del Gobierno desde la acción pública, desde la empresa pública con suelos públicos, vivienda pública, vivienda asequible para la ciudadanía", ha analizado la ministra.

Ha explicado que se trata de una actuación similar a otras desplegadas a lo largo y ancho de todo el país, "como en Madrid, el barrio de campamento, en Valencia, en Sevilla o también en las Islas Baleares".

La ministra ha incidido en que agilizarán los trámites para que cuanto antes sea posible ese proyecto aunque ha declinado dar un plazo sobre su posible conclusión.

El siguiente paso tras el Consejo de Administración que acuerde la comprá sera trabajar en el proyecto de demolición de unas instalaciones -el solar esta entre los barrios de La Rubia y Parque Alameda- en las que hay que depurar los suelos "y al mismo tiempo acompañar de un planeamiento especial y por supuesto ponernos a disposición de las autoridades municipales para, en su caso, valorar si cree necesario algún acompañamiento a esa actuación".

"Contaremos con ellos con su participación en el diseño de este nuevo barrio, de esta nueva actuación residencial que espero que podamos acelerar lo máximo los trámites administrativos", ha explicado la ministra.