La Zona Comercial Torrecilla ha lanzado una campaña para combatir el calor del verano, convirtiendo la calle en un espacio más humano, accesible y solidario. Bajo el lema del compromiso vecinal y el cuidado mutuo, los comercios de la zona ofrecen puntos de hidratación gratuitos y se abren como refugios frescos y seguros para cualquier persona —o mascota— que lo necesite.

La iniciativa, impulsada por la Asociación de Comerciantes Zona Comercial Torrecilla, Padilla y Lira, integrada en Fecosva, cuenta con la colaboración de la empresa H2Vital y se inspira en buenas prácticas de negocios locales como el restaurante Niza, la librería-café Akelarre o Materiales de Construcción Fede.

Se han instalado dos fuentes de agua fría accesibles a todo el mundo, ubicadas en las fachadas de la floristería La Señora Flores y Mobiliario y Decoración Oropel. Permanecerán activas durante el horario de apertura de los comercios, y cualquier persona podrá acercarse a beber agua sin compromiso alguno.

Pero el gesto solidario va más allá del agua. Todos los establecimientos de la zona mantendrán sus puertas abiertas como espacios de cuidado, ofreciendo un lugar donde sentarse, resguardarse del sol o pedir ayuda si alguien se encuentra mal. Además, las mascotas son bienvenidas, reafirmando el carácter inclusivo y comunitario de la propuesta. "Esta iniciativa nace del deseo de cuidar a nuestros vecinos, de apoyarnos como comunidad y de demostrar que el comercio de barrio es mucho más que un lugar donde comprar: es un punto de encuentro, de cercanía y de ayuda mutua", explican desde la asociación.

Este verano, la calle Torrecilla no solo lucha contra el calor, sino que reivindica su esencia como barrio vivo, cercano y solidario, donde cada pequeño gesto -una sombra, un vaso de agua o una puerta abierta- suma en el bienestar colectivo.