El Ayuntamiento de Valladolid, a través del alcalde Jesús Julio Carnero, recordó que "existir, ser uno mismo, visibilizarse, amar libremente, sigue siendo un acto de valentía en muchos lugares del mundo" y subrayó que la capital del Pisuerga "seguirá siendo un espacio de libertad para todas las personas".

El Consistorio celebró este viernes, 27 de junio, el Día Internacional del Orgullo LGTBI a través de un acto institucional presidido por el alcalde, bajo el lema 'Existir con orgullo es vencer cada día'. 

Uno de los momentos centrales del acto fue el reconocimiento al artista vallisoletano Dulzaro, nombre artístico de Alberto Domínguez Buitrón, quien leyó el manifiesto en el que dejó constancia de cómo, a través de la música, se puede mostrar una identidad "diversa y contemporánea".

El artista también ha repasado sus duros primeros años de vida, en los que ya se sentía diferente y los insultos en el colegio por cantar y bailar sin que nadie levantara la voz por ello, y en un reivindicativo manifiesto ha trasladado al alcalde que le entristece que no cuelgue en el balcón del Ayuntamiento la bandera arcoíris que caracteriza el Día del Orgullo.

Asimismo, en el acto se anunció que el Ayuntamiento, en colaboración con la Asociación de Hosteleros de Valladolid y la Mesa de la Diversidad, trabaja en la elaboración de una guía de buenas prácticas y un protocolo de actuación ante situaciones LGTBIfóbicas en locales de ocio. Este acuerdo refleja el "compromiso institucional con un ocio seguro, inclusivo y respetuoso".

Esa bandera "visibiliza y apoya el colectivo, sensibiliza a la sociedad contra la discriminación, reconoce la lucha por nuestros derechos, crea un entorno más seguro, inclusivo y reafirma el compromiso institucional con la igualdad", ha defendido.

Además ha recordado que "hay partidos políticos que niegan nuestros derechos, que no nos reconocen como personas dignas de respeto".

Y ha sostenido que a esos "partidos no se les debe dar voz, no se negocia con el odio. La extrema derecha que gobierna en este ayuntamiento parece obsesionada con la faceta festiva y desinhibida del colectivo LGTBI, como si el placer y la celebración fueran un crimen. Pero precisamente este espíritu libre del orgullo es una respuesta política. Desafía el miedo, rompe las normas que oprimen y reivindica el derecho a existir con alegría y con libertad".

El artista vallisoletano ha incidido en que no se puede permitir "que estas personas tengan palabra ni opinión sobre lo que dignifica o no al colectivo".

Y se ha dirigido en concreto a la concejala de VOX en el Ayuntamiento Irene Carvajal, a quien ha trasladado que "por mucho que un festival se llame Zorrilla Fest, eso no promueve la promiscuidad. Celebrar nuestra diversidad y disfrutar de la música no es ningún delito ni un ataque a la moral, es una celebración de nuestros derechos conseguidos".

"Estas declaraciones, además de ser una falta de respeto profundamente grave, hacen mucho daño al colectivo y siguen promoviendo el odio y demuestra que a la extrema derecha aún les incomoda nuestra existencia y que vivamos con libertad. Nos queda mucho camino por recorrer", ha reflexionado.

Ha enumerado uno por uno los siete casos de agresiones por delitos de odio en Valladolid, que ha considerado que "no es algo aislado. No son casos puntuales, es violencia estructural, es odio y Valladolid no puede seguir tolerándolo".

"Por eso es fundamental no callarse, denunciar, visibilizar, defendernos y defendernos entre todas, todas y todos. Gracias también al ayuntamiento y a su alcalde por permitirnos estar hoy aquí", ha trasladado.

En el acto, las voces de los distintos grupos municipales salvo VOX han leído el manifiesto de la federación de municipios y provincias para el día del Orgullo 2025; y el alcalde ha reflexionado sobre el lema de este año, que invita a moverse para ganar la vida y la libertad, ya que "quedarse quieto es la peor de las desigualdades".

Aunque no habrá bandera el balcón del Ayuntamiento, sí se iluminará el edificio del Consistorio, en la Plaza Mayor de Valladolid, y la cúpula del Milenio, con los colores del arco irís, ha recordado el alcalde.

Cabe destacar que el acto también sirvió para poner en valor el diseño del cartel conmemorativo, obra de la arquitecta vallisoletana Laura Alba, que ha sabido plasmar con sensibilidad el mensaje de este año.

La colorida jornada concluyó con una actuación musical de Miriam Sánchez y Carmen Bécares y una foto de familia, símbolo del compromiso compartido por una ciudad que apuesta por la libertad, el respeto y la convivencia.