Los dos concejales socialistas de Arroyo de la Encomienda, Eduardo Vela y Helena Muñiz, que fueron expulsados de su partido, han emitido un comunicado solicitando la revisión de su expediente disciplinario. 

Según el comunicado de los concejales, Santos Cerdán fue quien firmó su expulsión del ayuntamiento de Arroyo de la Encomienda hace algunos meses, después de que ellos denunciaran una presunta estafa por parte de la portavoz socialista de ese municipio. Los concejales alegan que esta decisión se tomó "sin tan siquiera escuchar sus alegaciones y ni contrastar los indicios". Por el contrario, sostienen que Santos Cerdán sí escuchó y negoció la salida de Leire Díez del partido.

La solicitud de revisión surge ahora, según Muñiz y Vela, tras un "extenso informe de la UCO que apunta al Sr. Cerdán como presunto miembro de una organización criminal, encargado de cobrar y repartir mordidas procedentes de obra pública, además de amañar presuntamente las primarias de 2014 y muchos otros indicios de conductas delictivas". Estos indicios son calificados como "muy graves" por el Secretario General y Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. En este contexto, los concejales sugieren que sus expulsiones deberían ser impugnadas, dado que su objetivo era "evitar prácticas corruptas e ilícitas semejantes a las presuntamente ejecutadas durante años por el firmante de las expulsiones".

Contexto de la expulsión original de los concejales

Helena Muñiz y Eduardo Vela fueron expulsados provisionalmente del PSOE en septiembre de 2024, tras la apertura de un expediente disciplinario por parte de la Comisión Ejecutiva Federal del partido. Ambos concejales han presentado alegaciones ante la Comisión Federal de Ética y Garantías, calificando lo sucedido como un "auténtico despropósito".

Su expulsión se produjo después de que denunciaran "problemas e irregularidades" internas y trataran de apartar de la portavocía en el Ayuntamiento de Arroyo de la Encomienda a Alba Acero, a quien consideran afín a la secretaria general del partido en el municipio, Beatriz Fraile. Los ediles han insistido en que fueron expulsados por "resultar incómodos".

Entre las "irregularidades" denunciadas por Muñiz y Vela, se encuentra el uso de la cuenta del Grupo Municipal Socialista en el consistorio por parte de Alba Acero. Helena Muñiz ha detallado que esta cuenta es para "uso exclusivo del Grupo Municipal" y "para gastos derivados del desempeño de las funciones de los tres concejales socialistas", sujeta a control financiero. Sin embargo, la concejal ha acusado a Acero de autorizar a una "cuarta persona en la cuenta para poder realizar pagos" y de usar esta "argucia y artimaña" para "realizar el pago de varias facturas de importes considerables y relevantes" cuyos conceptos y destinatarios desconocen. Por ello, solicitaron a Alba Acero la "devolución de las cantidades sustraídas" y su dimisión. También solicitaron el cambio de portavocía debido a la supuesta limitada disponibilidad de Acero.

Versión del PSOE de Arroyo de la Encomienda

Por su parte, el PSOE de Arroyo de la Encomienda emitió un comunicado donde afirma que la expulsión de Eduardo Vela y Helena Muñiz fue causada por "una serie de acciones realizadas por dichas personas, reiteradas en el tiempo y contrarias a los estatutos del partido y el mandato de la dirección de este".

Desde el partido local, se apunta que los dos ediles tenían "como fin último su beneficio personal". Se explica que, a raíz de no aceptar la dirección del partido ni la portavoz el inicio de negociaciones que consideraban "inadecuadas" e "irrespetuosas hacia los votantes", comenzó una "campaña de acoso y derribo tanto a la portavoz del Grupo Municipal como a la secretaria general del partido en el municipio". El PSOE de Arroyo sostiene que ambos concejales "estuvieron en contra de las directrices y estrategias del PSOE" y que su "único fin era que se negociara una serie de puestos de libre designación con el partido que gobierna el Ayuntamiento, sin que éste hubiera ofrecido nada".

El Grupo Municipal Socialista añade que los concejales expulsados "alegaban la pérdida de ingresos por no negociar algún puesto", y que "han aprovechado cualquier ocasión para difamar, incluso rompiendo la disciplina de voto y poniendo en entredicho la honorabilidad de personas y estamentos del Partido". La "gota que colmó el vaso" fue el intento de cambiar la portavocía "a espaldas de la propia portavoz y en contra de la dirección del Partido". El PSOE califica las acusaciones de irregularidades en las cuentas como una "falsedad manifiesta" y defiende que las acciones de la portavoz y la Comisión Ejecutiva Municipal son "totalmente legales y están siendo respaldadas en todo el ámbito nacional por los estamentos que fiscalizan dichas cuentas".

A pesar de la situación, Eduardo Vela y Helena Muñiz han asegurado que esta expulsión "no va a impedir" que continúen con su "objetivo primigenio" de "trabajar por y para un Arroyo mejor".