El segundo día de cónclave ha comenzado con una nueva 'fumata negra', tras las dos votaciones que han tenido lugar en la mañana de este jueves. A las 11.53 horas, los fieles que se encontraban en la Plaza de San Pedro han visto salir de nuevo el humo negro de la chimenea ubicada en el tejado de la Capilla Sixtina. 

Esto significa que todavía no hay un candidato que haya logrado los dos tercios de los votos necesarios para resultar elegido como sucesor de Francisco, es decir, 89 votos. 

No obstante, las votaciones han ido bastante más rápido en la mañana de este jueves, después de que el día anterior se retrasara más de dos horas del momento anunciado para la salida del humo por la chimenea. 

Los cardenales volverán esta tarde a la Capilla Sixtina para dos nuevas votaciones, por lo que la próxima 'fumata' se espera que sea a partir de las 19 horas. Podría adelantarse en el caso de que algún candidato reuniera los votos suficientes en la primera votación de esta tarde. 

Los 133 cardenales tienen en la mesa, para su eventual consulta, un ejemplar de la Constitución vaticana y otro que regula el funcionamiento de esta reunión destinada a elegir al nuevo pontífice. 

Asimismo, la papeleta, de forma rectangular, lleva escritas en la mitad superior las palabras: Eligo in Summum Pontificem (elijo como Sumo Pontífice), mientras que en la mitad inferior hay un espacio para escribir el nombre del elegido.

Cada cardenal escribe el nombre de su candidato en la papeleta, la dobla y la lleva en la mano, de tal forma que sea visible para todos, hacia el altar. Allí, frente a los tres escrutadores pronuncia la siguiente fórmula, en italiano: 'Llamo a Cristo el Señor, que me juzgará, como testigo de que mi voto va para quien, según Dios, considero que debe ser elegido'. Es entonces cuando introduce su voto en la urna.