Su cuerpo fue hallado en torno a las 5.30 horas tras una intensa búsqueda
Conmocionada, con cara de circunstancias y emocionada por ser 'su' "barrio". Así se mostró este miércoles ante la prensa la subdelegada del Gobierno en Valladolid, Alicia Villar, que reconoció estar "apenada" y "llorosa" por lo sucedido lamentando, a su vez, "profundamente", la explosión que se registró en el edificio de la calle Goya número 32 de la capital. En cualquier caso, quiso transmitir "tranquilidad" y "buenas sensaciones" tras visitar a los afectados que se encuentran hospitalizados tanto en el Río Hortega como en el Clínico.
Preguntada por las causas y las consecuencias de la explosión, Villar prefirió no avanzar ni confirmar "nada" porque, aunque parezca que haya sido "un suceso accidental", no es la persona que lo tiene que confirmar, de momento, por el poco margen de tiempo que han tenido los técnicos para investigar los hechos. "Las causas están por determinar. Hay técnicos, en todo momento, inspeccionando el edificio y valorando los daños estructurales, que son muy importantes. Hay que tener las máximas precauciones. Es mi barrio, mis padres viven aquí y conozco a la gente que vive aquí. Estoy bastante llorosa. Desde el primer momento, hemos estado en contacto con la Policía Nacional y con el alcalde, Jesús Julio Carnero, que tiene previsto acercarse a la ciudad", apuntó.
Además, ha felicitado a los efectivos que estuvieron presentes toda la noche como los sanitarios, que dieron el alta "a cuatro afectados en plena calle". Por esa razón, tampoco desveló los daños físicos que arrastra cada caso porque prefiere "esperar" a los "informes de los médicos". "Han estado toda la noche trabajando. Las personas desalojadas estarán nerviosas, pero están ya descansando", sentenció.
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