Pablo Martín vuelve a casa. El alero vallisoletano, también capaz de jugar como ala-pívot, regresa al UEMC CBC Valladolid tras dos temporadas cedido en Segunda FEB, primero en Morón -donde logró el ascenso- y después en Córdoba, donde consolidó su progresión como uno de los nombres destacados de la categoría. Será el tercer jugador confirmado para el nuevo proyecto de David Barrio, junto a Juan García-Abril y el fichaje de Isaac Haney.
Formado en la cantera morada, Pablo Martín (31 de agosto de 2001 - Valladolid) destaca por su intensidad defensiva y versatilidad, condiciones físicas que le permiten rendir tanto de 'tres' como de 'cuatro'. Durante estos dos años cedido, ha mejorado notablemente su capacidad ofensiva, rango de tiro y toma de decisiones, convirtiéndose en un jugador más completo.
Una evolución firme desde la base
Tras completar toda su formación en la IVECO Academy del club, su primera aparición con el primer equipo fue en la temporada 2022/2023, aunque ese curso se vio truncado por una grave luxación de hombro sufrida en febrero, cuando alternaba minutos entre el primer equipo y el filial.
En busca de continuidad y minutos, fue cedido al CB Starlabs Morón, donde disputó 32 partidos con unos promedios de 5,2 puntos, 2,9 rebotes y 4,8 créditos de valoración en 15 minutos, ayudando al ascenso del equipo andaluz a Primera FEB.
En la 2023/2024, Pablo Martín continuó su progresión en Córdoba, donde dio un nuevo paso adelante con 25 partidos disputados, promediando 7,2 puntos, 4,1 rebotes y 8,6 de valoración en 19 minutos, siendo clave en una plantilla que rozó los playoffs de ascenso.
Una apuesta firme del club y del jugador
Con su regreso, Pablo se convierte en una pieza estratégica para David Barrio, que valoró muy positivamente su incorporación: "Recuperarlo era absolutamente prioritario para el club y para mí. Pablo ha madurado mucho en estos dos años y está preparado para ser un jugador importante", explicó el entrenador.
Barrio destacó que "no queremos jugadores vallisoletanos por cubrir cupos, sino jugadores que aporten de verdad, y Pablo lo es". Subrayó también su capacidad defensiva, su mejora ofensiva y su compromiso desde el primer momento: "Volver a casa siempre tiene cosas buenas, pero también responsabilidad, y Pablo la ha asumido desde el primer minuto. Tiene talento, energía, y representa perfectamente el perfil de jugador vallisoletano que queremos en esta plantilla", concluyó.
Con su regreso, el UEMC CBC Valladolid refuerza su identidad local y da otro paso en la construcción de un proyecto sólido y competitivo para la temporada 2025/2026.