El Ayuntamiento de Valladolid destina un total de 13.436.257 euros a las obras de rehabilitación energética y estructural del Teatro Lope de Vega; tras la adjudicación del contrato a la UTE Obrascón Huarte Laín, S.A. - Cabero Edificaciones, S.A en la Junta de Gobierno de este 19 de agosto.

La actuación cuenta con financiación procedente de los fondos europeos NexGeneration, correspondientes a la Convocatoria de Ayudas del Programa de Impulso a la Rehabilitación Edificios Públicos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. 

Estas obras, que cuentan con un plazo de ejecución aproximado de 22 meses, garantizan la mejor conservación de una edificación del máximo valor histórico y artístico de la ciudad. La intervención sobre el Teatro Lope de Vega lleva consigo la protección, recuperación y puesta en valor, así como su incorporación a la infraestructura cultural municipal al devolverle su uso original de teatro. 

Los estudios arquitectónicos Paredes Pedrosa Arquitectos y Contextos de Arquitectura y Urbanismo son los responsables del proyecto de rehabilitación del Teatro Lope de Vega. Esteb ha sido redactado por ambas empresas asociadas en una Unión Temporal de Empresas, con el fin de acometer esta intervención que transformará este edificio histórico en un espacio polivalente y flexible.

De esta forma, los arquitectos responsables de la obra han planteado la rehabilitación atendiendo a criterios de flexibilidad y polivalencia, proyectando tres espacios en uno, que pueden funcionar de manera simultánea o de manera autónoma. Contará con la Gran Sala, cuyo aforo será de 501 plazas sentadas y 736 para eventos de pie; con el Espacio María de Molina, que lucirá una grada retráctil y con el Espacio Veinte de Febrero, una sala polivalente con acceso directo a la calle.

Además, la rehabilitación contempla la ampliación de la torre escénica existente hasta una altura de 28 metros, a la que se incorporarán todas las estructuras necesarias para el posterior montaje de un peine escénico motorizado, así como las pasarelas técnicas inferiores. 

El proyecto contempla la consolidación estructural integral del edificio existente y plantea como estrategia principal, la construcción de una estructura de hormigón armado visto que envuelva las existentes fachadas de María de Molina y Veinte de Febrero así como las medianeras, los muros de la sala y el escenario, consolidando su estabilidad estructural y configurando los espacios nuevos.

Los criterios generales de actuación, sobre los elementos del edificio histórico de mayor valor y mejor estado de conservación, serán de restauración y recuperación de elementos originales, con el fin de restablecer el orden y la limpieza originales.

A causa del deteriorado estado de las estructuras y del  escaso  valor  arquitectónico  de  los  espacios  interiores intermedios se  plantea  una  nueva  configuración  de  estos ,  con  forjados  de  hormigón  armado visto que continúan la envolvente interior estructural, creando espacios diáfanos y dobles alturas.

La construcción será óptima y eficiente con un consumo energético casi nulo. Se han tenido en cuenta criterios medioambientales, de sostenibilidad respecto a la construcción. También soluciones bioclimáticas aplicables a su uso específico como la doble piel de la torre escénica y la fachada fotovoltaica.