El Instituto Nacional de Estadística ha revelado que los precios hoteleros han aumentado un 20,6%, es decir, una habitación que en junio de 2021 costara 70 euros, en junio de 2022 costaría unos 84. La "falta de demanda y los elevados costes fijos de los hoteles", entre suministros y costes laborales, han provocado que alrededor de 400 habitaciones permanezcan cerradas en la ciudad, según Francisco Posada, presidente de la Asociación de Hoteles de Valladolid.

Pese a que la ocupación para septiembre "está muy baja todavía", Francisco Posada afirma que para el fin de semana de las fiestas de la ciudad se sitúa "en este momento en torno al 60%", una cifra que es "normal" teniendo en cuenta que "todavía falta un mes".

El grado de ocupación de hoteles vallisoletanos en junio ha aumentado casi un 5% respecto al mismo mes de 2021, alcanzando alrededor de un 47% de ocupación. Francisco Posada estima que agosto terminará en torno al 50% o 55%, "dependiendo del hotel".

En estas fechas estivales, los viajeros pernoctan una media de un día y medio para llegar a su destino, es decir, Valladolid se convierte en una ciudad de paso. El presidente de la asociación espera que "este fin de semana sea un poco mejor por el viajero de paso, que aprovechará la fiesta del lunes 15".