El verano portugués es cita habitual para los equipos vallisoletanos de voleibol. Desde hace ya algunas campañas varios clubes se desplazan a las localidades de Espinho y Lousa para tomar parte en sus respectivos torneos, con varios equipos repartidos en diferentes categorías.

Un evento que este año tenía un sabor especial, ya que era el primero después de dos años de parón por culpa de la pandemia. Había ganas y eso se notó en los 24 equipos que se desplazaron.

De ese total, 16 de la expedición vallisoletana estuvieron presentes en la Summer Cup de Lousa, a unos 30 kilómetros de Coímbra y en plena Sierra de Leiria. El grueso lo formaban los 12 equipos del Valladolid Club Voleibol (VCV), con cuatro masculinos (alevín, infantil, cadete y juvenil) y ocho femeninos (dos infantiles, cuatro cadetes, uno juvenil y uno junior). Junto a ellos también se desplazaron el equipo infantil femenino de Agustinas, el cadete de Arroyo, el cadete de Núñez de Arce y el juvenil de Zaratán. 

Todos sufrieron la dureza de una competición con siete partidos en cinco días que estaba unido al intenso calor que se vivió en toda Portugal la pasada semana. En lo estrictamente deportivo, destacar el segundo puesto del juvenil masculino, la tercera plaza del cadete masculino, el cuarto del junior femenino o la quinta posición de uno de los cadetes femeninos, todos ellos de Vcv. 

Mientras, a unos 150 kilómetros pero en dirección a la costa, 70 representantes de UValquirias se desplazaban a Espinho a la AMB Volleyball Cup, repartidos en ocho equipos.

Todos estuvieron a la altura, pero hay que destacar el primer puesto del equipo alevín, el segundo del infantil o la quinta plaza del cadete. Todo ello en una competición en la que se dieron cita más de 375 equipos. 

Dos eventos que sirven a todos los clubes para poner el punto y seguido a la pasada temporada, pero también para comenzar a planificar la siguiente, pudiendo mezclar jugadores de diferentes categorías.