Las 8 y cuarto de la mañana, en un escenario mágico de Segovia, la pradera de San Marcos, donde el Eresma pasa silencioso bajo la mole de la ciudad vieja, la altura de caliza sobre la que otea el Alcázar.

En este lugar emblemático ha citado 'Pitufollow' (nombre en las redes de Sergio Turull) a sus seguidores de redes y pasos, un grupo de más de 120 corredores – muchos locales, pero también hay quienes han venido de otras ciudades vecinas – muchos con los calcetines solidarios que ayudan a la Fundación Juegaterapia a acondicionar áreas de atención a los pacientes de oncología infantil en el Hospital Virgen de las Nieves de Granada.

Hay quien comienza a calentar para acompañar el mayor tramo posible al corredor, un atleta que ha hecho un hueco en las redes sociales a su afición y sus retos. El de este verano '50,50,50' consiste en visitar 50 ciudades, en 50 días consecutivos, corriendo 50 kilómetros en cada una. Hay que calentar, aunque el proyecto no pide que los valientes madrugadores acompañen a Sergio durante toda la prueba segoviana: quien quiera, puede correr con él hasta las 2 de la tarde, en un circuito que sale y entra de la ciudad por las alamedas y sendas del Clamores y el Eresma. Quien no termine los 50 kilómetros puede recorrer diez, veinte, cien metros... lo importante es salir a cuidar el cuerpo con ejercicio, y brindar el esfuerzo por una causa noble.

Mientras Turull charla con los periodistas y el concejal de Juventud, se acerca otra figura local del atletismo, Javi Guerra, que acompañará a Sergio en los primeros kilómetros porque luego tiene que "ir a entrenar" y volverá a última hora de la mañana, para los pasos finales. Genio y figura. Esfuerzo y tesón.

"Estoy muy agradecido por la acogida", habla 'Pitufollow' (es su nombre en las redes) a sus compañeros de trote a través de un altavoz de mano, "y vamos a pasarlo muy bien hoy, en una buena mañana, cada uno a su ritmo, con los kilómetros que queráis hacer, con el avituallamiento de bebida y fruta para todos".

A Turull, este verano le sostiene una marca de bebida deportiva que le ha facilitado la logística y el presupuesto para llevar a cabo el '50,50,50': la aventura terminará en Barcelona, la ciudad de Sergio Turull, el 10 de agosto "así que aún hay mucho verano por delante", dice el deportista, que se presenta como "corredor de ultrafondo".

El pasado año, la aventura de Sergio Turull recaudó para Juegaterapia más de 58.000 euros y, en las 14 etapas de este verano, ya se han recogido 18.000 euros. El reto se inició en Canarias "por temas de logística" y después saltó a Andalucía "donde ha habido mucho calor, pero el entrenamiento de estas pruebas ya lo tiene en cuenta". Además, cada jornada se inicia pronto, a las 8 y media, "para aprovechas las mejores horas para correr".

Desde luego, son las mejores horas para correr, pasear, escuchar y ver los globos aerostáticos que llevan ya un buen rato sobrevolando la ciudad, disfrutar la fauna de los valles del Clamores y del Eresma... un inicio de domingo, en verano, en Segovia, es un regalo para cualquier persona que quiera disfrutar la ciudad casi en soledad... hasta que llega a la pradera de San Marcos y, hoy, se encuentra con los más de 120 entusiastas corredores que, a una señal de Sergio Turull, de 'Pitufollow', dan la primera zancada hacia el río. Muchos de ellos – los de aquí- ya conocen la senda umbría, ajustada al valle rocoso, por la que se esconden a su paso mirlos, petirrojos y carboneros. Los corredores de fuera alternan la mirada entre la altura – ahí arriba campean las torres del Alcázar y la muralla segoviana – y el sendero verde. Y Turull corre en primera fila, móvil en mano, grabando para sus redes sociales – 'Pitufollow cuelga cada día la carrera de esa jornada'- la experiencia de atravesar parajes mágicos de Segovia. Ayer, los de Ávila. Mañana, Soria. Y cada jornada, el arrope de seguidores entusiastas que quizá no terminen una carrera 'Ironman' ni 'Spartan'; que quizá nunca lleguen a correr en el desierto. Pero que una mañana de verano, en alguna de las 50 ciudades del proyecto, han dicho 'a por ello, es por algo hermoso'.